Accueil > Argentine > Social > Initiatives > Ligas Agrarias Argentinas : Los campesinos despiertan y se organizan
Desde Puro Pueblo hemos dicho siempre que la larga marcha hacia la Patria Socialista tiene como protagonistas a la clase obrera y el pueblo. Y cuando hablamos de « pueblo » nos estamos refiriendo a sectores sociales que son y deben ser aliados de la clase obrera, porque su situación de explotación como sus enemigos son comunes.
Uno de esos sectores es sin duda conformado por los pequeños y medianos productores agrarios, víctimas del sistema y pisoteados por el monopolio de las tierras por parte de la oligarquía y los monopolios de la comercialización de los productos agrarios. Dos pulpos, emparentados, que roban el sudor campesino.
Precisamente, este sector de pequeños y medianos productores ha despertado y se ha lanzado a la lucha, independizándose de quienes siempre usufructuaron sus luchas. Ahora tienen su organización propia : Las Ligas Agrarias. Y desde allí, desde ese movimiento de masa, deberán converger junto a la clase obrera en un « Programa de Liberación » que los abarque.
Es por eso que « Puro Pueblo » quiso hacer conocer lo que son y por lo que luchan las Ligas Agrarias. Para el primer tema encontramos un importante y profundo material en el libro de Francisco Ferrara. Para el segundo, compartimos con casi nueve mil campesinos su « Parlamento Agrario Nacional » reunido en Villa María hace pocos días.
Es en 1970 cuando las Ligas Agrarias hacen su aparición pública, hecho que adquiere marcada importancia por tratarse de la primera experiencia por tratarse de primeras experiencias del campesinado pobre y medio, e inaugura su participación en la vida política nacional.
Pero debemos buscar su origen muchos años atrás. Francisco Ferrera, en su libro « ¿Qué son las ligas agrarias ? » hace partir esta historia desde 1948, cuando la Acción Católica Argentina decide formar grupos de jóvenes para trabajar en zonas rurales. El trabajo inicial de estos jóvenes es de evangelización, es una tarea eclesiástica preocupada por el espíritu del campesino, pero divorciado de la dura y amarga realidad que vivía el agricultor.
Y fue esa misma realidad, esa existencia campesina marcada por la explotación y la prepotencia latifundista que sacudió a estos jóvenes y los obligó a revisar sus formas de trabajo y darles una nueva dirección. Habían pasado ya 10 años, y en 1958 surge el Movimiento Rural.
Este Movimiento Rural, por su origen social-cristiano, toda una época trabajó creyendo en la posibilidad de « humanizar » esa realidad social opresora que sufría el campesino ; creía que era posible eliminar las injusticias haciendo un « pacto » campesinos y latifundistas. Es decir, que el latifundista aceptara que el campesino necesitaba elevar su nivel de vida y, a su vez, el campesino explotado, logre un equilibrio entre sus deberes y derechos. Sin embargo, a medida que crecían los grupos que formaban este Movimiento Rural, y que empezaban a expresar sus necesidades : reclamos de tierra, mayores precios, asistencia sanitaria y educativa, el Movimiento hace crisis. Crisis que es superada positivamente, por dos hechos importantes : los compañeros del Movimiento Rural tenían una vinculación estrecha con el campesino, y el otro hecho, la discusión permanente y democrática en esos grupos. Ambos hechos permitieron su crecimiento y superación constante.
Además su desarrollo se enriquece con la participación en Congresos y Asambleas mundiales donde conoce experiencias y trabajos desarrollados en otros países de América. Y en el trabajo y análisis conjunto se comprueba que las causas del atraso en los sectores campesinos, son los latifundios y monopolios imperialistas. Comprobación que necesariamente exigirá nuevos métodos de trabajo.
Y es en torno a la lucha antimonopolista que el Movimiento Rural formará la primera Liga Agraria, la del Chaco. El Movimiento Rural no desaparece, no se disuelve, sino que empieza a cumplir otras funciones, cada vez más necesarias : desligado, de alguna manera, de lo reivindicativo, comienza a brindar elementos teóricos y cubrir necesidades políticas. Mientras las nuevas organizaciones, las Ligas Agrarias, son las que nuclean y unen al campesinado para defender sus reivindicaciones.
¿Qué pasó en la relación entre el Movimiento Rural y la Iglesia ? La iglesia apoyó al movimiento mientras su trabajo fue asistencial, pero, cuando observa que el movimiento va madurando y va dando a su trabajo una orientación política y de alguna manera clasista, la Iglesia intenta frenar este desarrollo, porque el campesinado se le escapa y ya no puede aprovecharlo como « fuerza propia ». Es entonces cuando se rompe la relación entre ambas.
Un ejemplo concreto, la trayectoria del obispo Di Stéfano en el Chaco. En los primeros años se lo llamó « el obispo del algodón » ; era una figura destacada, respetada por el campesino, porque veían a la cabeza de sus movilizaciones un representante de la iglesia combativo y entregado. En sus primeros discursos decía : « Yo ahora veo esto con más esperanza, antes lo veía con temor, pero hoy yo les puedo decir a uds. Que a esto, no por las promesas que les hacen sino por la conciencia que está brotando y creciendo en ustedes, sí ahora tengo esperanza, porque uds. tienen la frente alta y no la han de bajar más ».
Sin embargo, llega un momento en que empieza a temer la radicalización de las Ligas y llama a la « pacificación », a la « reflexión » y deja claro que si no se consigue este apaciguamiento, él ya no está de acuerdo con la nueva orientación.
Después de la visita de Lanusse, pide confianza en las promesas del presidente y dice : « …ahora nos corresponde entrar en una nueva etapa de serenidad, de reflexión, de capacitación agraria y de superación…se hace necesario crear un clima de confianza, superando la belicosidad, para facilitar incluso la eficacia de algunos mecanismos oficiales… ».
¿Qué pasaba ? El obispo cedía a otros intereses y su trabajo seguía correspondiendo a la vieja concepción “asistencial”, caritativa. Método de trabajo muerto ya, porque el campesinado había aprendido que era capaz de expresarse independientemente a través de las Ligas y que su capacidad de lucha estaba probada.
Fue, en alguna medida, difícil para las Ligas resolver este enfrentamiento, por la influencia de la Iglesia en su origen y por la trayectoria del obispo. Sin embargo, la solidez de las Ligas y la cautela de sus dirigentes permitieron un desenlace que no quebrara el trabajo desarrollado. Se evitó el enfrentamiento público para no desviar el eje principal de su trabajo : la consolidación de la organización.
¿Cómo se formaron las primeras Ligas Agrarias ? Tenemos como ejemplo, por ser las primeras, las Ligas Agrarias del Chaco.
El Movimiento Rural venía trabajando desde hacía varios años, en esta provincia, con los grupos de base de cada colonia, impulsando la discusión y organización, lo que permitió contar con algunos líderes campesinos capaces de dirigir y organizar lo que serían las Ligas Agrarias.
El Movimiento Rural hace conocer al campesino chaqueño de una maniobra monopólica de la empresa « AGREX » (formada por varias compañías norteamericanas y representada en el país por la firma « P.A.L. » Pedro y Antonio Lanusse). La denuncia explica que al concretarse el proyecto de AGREX –instalar un complejo agro-industrial- era factible la expulsión de los campesinos que ocupaban ese millón de hectáreas que pretendía la empresa.
Conocida esta situación, el campesinado chaqueño afianza su decisión de lucha y en este clima agitado prepara su primer cabildo abierto con dos acusados : La Federación Agraria Argentina, repudiada por su permanente freno de las luchas y su no disimulado compromiso con la Sociedad Rural y el gobierno ; y el otro acusado, los monopolios, de los que AGREX había servido de ejemplo.
El 14 de noviembre de 1970 se realiza el primer CABILDO ABIERTO que bajo la consigna « Grita lo que sientes », « Cabildo Abierto », congrega a 4.000 productores.
Y con este Cabildo se cierra una etapa, termina la época en que el campesino era usado en beneficio de los latifundistas y monopolios ; y comienza un momento nuevo que sorprende por sus planteos de alcanzar lo reivindicativo a través de la creación de organizaciones distintas, sostenidas por la participación conjunta del campesinado, capaces de llevar adelante su lucha, con un programa de nuevo tipo, rechazando la forma de delegación utilizada por la Federación Agraria. Organizaciones que llamaron Ligas Agrarias Chaqueñas.
Resolución del primer CABILDO ABIERTO :
Viendo también que es necesaria la existencia de una organización ágil y sensible que asuma con plena libertad todos los problemas del campesinado chaqueño, facilitando su integración definitiva en los organismos de la vida agraria, proponemos :
– 1)Propiciar la formación de las Ligas Agrarias Chaqueñas ;
– 2) Esas Ligas estarán constituidas por todas pequeñas o grandes entidades agrarias que ya hayan formado en las distintas colonias o progresivamente vayan formándose ;
– 3) La finalidad principal de las Ligas será fomentar una permanente toma de conciencia del campo y denunciar las injusticias y atropellos que se vayan verificando.
En Enero de 1971, previo a toda una etapa de discusión y análisis de la situación desarrollada por el Movimiento Rural, se realiza el Congreso Constitutivo de las Ligas Agrarias Chaqueñas. El Congreso resuelve nombrar una Comisión Central Provisoria que se encargaría de redactar los Estatutos y dar los primeros pasos organizativos.
El 8 de Febrero de 1971, la ciudad de Sáenz Peña es escenario de una manifestación de 1.500 campesinos. Después de terminado el acto –un verdadero diálogo entre los campesinos y sus dirigentes- sin motivo alguno, policías armados con garrotes, perros, lanzagases empezaron a golpear a los asistentes y detuvieron a varios. Este hecho les deja una enseñanza.
Los campesinos comprenden que si continúan en su lucha y profundizan sus denuncias, muchas veces se enfrentarán con la represión. Y esa violencia llega al secuestro y tortura de Norma Morillo, miembro del Movimiento Rural.
Uno de los tantos métodos que usó en ese momento la dictadura militar, para atemorizar, intimidar, « antes de que fuera demasiado tarde », porque le preocupaba la dimensión revolucionaria de las Ligas.
Sin embargo, estos hechos sirvieron de aprendizaje. Las palabras de Norma Morillo son testimonio de ello : « Esto muestra claro que la violencia no nace del pueblo, nace de los grupos de `poder que ya ven cada vez más difícil la duración de este sistema de explotación… Compañeros : debemos ser muy concientes del mundo que queremos para mañana, si queremos un mundo más justo, donde todos tengamos la posibilidad concreta de vivir, comer, estudiar y trabajar dignamente. Debemos también ser concientes del riesgo que eso significa, y hay que superar el miedo…que es el instrumento con el cual nos cierran las bocas y nos atan las manos… »
(Diálogo tomado de un folleto de las Ligas)
Esculapio : ¿Cómo están organizadas ?
Eloy : Las Ligas tienen una forma muy especial de organización, porque la base de su fuerza está en todas las familias de cada Colonia.
Esculapio : ¿Pero cómo es eso de la familia ?
Eloy : Sí, esto es muy importante porque en las Ligas Agrarias de Colonia participa toda la familia, hombres, mujeres y jóvenes. Es decir, primeramente se reúnen todas las familias de la Colonia, se forma una Comisión Coordinadora y en forma periódica o cada vez que sea necesario, se reúnen para analizar la situación del campo y también problemas concretos…
Esculapio : ¿Qué hace esa comisión Coordinadora ?
Eloy : Como su nombre lo dice, coordina las ideas y el trabajo dentro de la liga. Si se trata de un problema que no podemos solucionar en la Colonia, se lo lleva al Comité de Lucha de la Zona.
Esculapio : ¿Quiere decir que hay un Comité de Lucha y reuniones zonales ?
Eloy : La cosa es así : cada zona, por ejemplo Quitilipí, Tres Isletas, es decir que dos delegados por Liga de Colonia se reúnen cuando es necesario para tratar los problemas de la zona. Esa misma reunión designa a tres o más compañeros responsables de la zona, y éste es el Comité de Lucha.
Esculapio : No me informaste de la Comisión Coordinadora Central y de los Congresos…
Eloy : Es cierto, me olvidaba. Todos los años se organiza un Congreso Ordinario para revisar lo que se ha hecho y designar nuestros representantes que es la Comisión Coordinadora Central y te aclaro que cuando hay problemas graves y nos afectan a todos se llama a Congreso Extraordinario para ver lo que se va a hacer.
Las Colonias nuclear varias chacras ocupadas por familias campesinas. Estas Colonias, por lo general, tienen un almacén de ramos generales, una escuela, un dispensario, a veces una capilla y caminos de tierra que lo comunican con la ruta asfaltada.
Las familias de cada Colonia están unidas por parentesco o amistad que hace más fácil su relación. Su primera forma de organización es la Asamblea de Colonia, donde discuten necesidades, denuncian a acopiadores, plan de acción de las Ligas, etc. Y no faltan anécdotas, problemas familiares, etc.
Cuando la Colonia evalúa que está en condiciones de crear una Liga se llama a asamblea de vecinos y se elige la Comisión de la Colonia. La forma de elección es variable y responde a las inclinaciones de los agricultores. Por ejemplo, puede ser una votación a voz viva o secreta. Proponiendo un solo nombre o varios.
Dos miembros de la Comisión de la Colonia integran el Comité de Lucha Zonal, que agrupa a varios colonos de una misma zona. Estos organismos, a su vez, participan de la Comisión Coordinadora Central, que depende del Congreso General. Es decir, la forma de organización de las Ligas Agrarias parte desde las bases.
¿Y quién dirige ?, pregunta Esculapio.
La cosa la dirigimos todos –dice Eloy- a través de nuestros compañeros coordinadores de Colonia, Comité de Lucha y Comisión Coordinadora Central, quienes respetan las decisiones tomadas en cada Colonia y en los Congresos.
Estos cuatro elementos se deben desarrollar en forma pareja, sino se corre en riesgo te desnivelar « la mesa » y poner en peligro a la organización en su conjunto.
Es decir, todo problema debe ser discutido por el conjunto de los compañeros : a)darse formas de organización adaptadas a ese problema o situación ; b)planteado y conocido el problema, impulsar la concientización sobre el mismo c) y por último, ir creando medidas para movilizarse cuando las circunstancias lo exigen para el logro de las reivindicaciones.
La movilización : tomaremos como ejemplo, la visita de Lanusse al Chaco en Abril de 1972. Comienza su visita en Resistencia, donde no le cuesta entrar en clima porque sus interlocutores son la CGT, la Federación Agraria, la Federación Económica de Chaco. Pero es en Sáenz Peña, frente a 4.000 campesinos, donde no sabrá enfrentar a una masa consciente de sus demostraciones de fuerza creciente.
Habla Carlos Picoli : « la acción de los monopolios cuenta con grandes aliados en el país, entre ellos la firma Antonio y Pedro Lanusse -¡sus parientes ! Lanusse intenta abrazarlo- y el dirigente le contesta : “le voy a dar un abrazo si algún día cumple con todas las promesas que nos ha hecho ».
Fue éste un encuentro insólito y alarmante, donde se enfrentaron un presidente ignorado y una masa combativa, sin claudicaciones, consciente de su fuerza e intereses.
« Otra cosa importante del acto fue ver que Lanusse es de carne y hueso, como todos, porque ante la verdad que dijeron nuestros compañeros, que era nuestro fiel pensamiento, se tuvo que guardar el discurso en el bolsillo y defenderse como gato panza arriba ».
El diario propio : “El Campesino” : herramienta de trabajo para unir, concienciar y organizar. En el diario se cuentan las experiencias de lucha, se comenta la situación política, se hacen conocer los objetivos de las Ligas y se informa sobre las Ligas de otras provincias.
El paro activo : Significa un salto cualitativo en la experiencia de los agricultores. Todas las zonas contaban con su Comité de Lucha, en el cual se evaluaba la situación permanentemente y se tomaban medidas para evitar “el carnero” y la represión. Y contó además como saldo altamente positivo el apoyo de las Ligas de otras provincias.
Decía Piccoli : « …lo importante es que el paro fue una medida regional. Y eso tiene que ver con que hemos avanzado en la organización. Hay dos tipos de necesidades que nos llevan a coordinar las luchas : económicas y políticas. Económicas, porque los campesinos tenemos productos que son regionales, por ejemplo en algodón, y para defenderlos tenemos que hacer un frente común… y la necesidad política : aislados, la represión tiene muchas posibilidades de eliminarnos…es más, en este sentido estamos iniciando el diálogo con los gremios que están en la lucha para salir en conjunto. Para el paro activo pedimos la adhesión de los gremios en las cuatro provincias ».
Este paro mostró la validez e importancia de su forma de organizarse a partir de las bases, porque fueron las Comisiones de Colonia las que dirigieron y garantizaron el cumplimiento de esta medida de fuerza.
En cambio, otras veces, se evaluaba que las movilizaciones muy seguidas podían perturbar la consolidación política y organizativa. Por ejemplo, cuando Lanusse vuelve por segunda vez, se difunde un comunicado donde se explica esto : « Las Ligas Agrarias no tomarán medidas de fuerza contra la venida del presidente, porque consideramos que no vale la pena, preferimos continuar con nuestras tareas agrícolas…pero advertimos que si el gobierno no se preocupa en hacer justicia, la haremos nosotros y en conjunto, porque ya no estamos dispuestos a que nos sigan robando la producción de las manos, y a que se nos arree como majadas de ovejas rumbo a la horca ».
En el Primer Cabildo Abierto de las Ligas Agrarias Chaqueñas, Lovey señala : « …el Cabildo es netamente ruralista no aceptándose adhesiones de tipo político. Los políticos tienen una gran deuda con el campesino y tienen que saldarla ».
No significa esto que las Ligas como organización estén incapacitadas o no deban dar su posición frente a hechos políticos. Lo han hecho. Así, frente al G.A.N. dijeron : « …El Gran Acuerdo no es Grande ; el acuerdo es el de una minoría. El de minorías explotadoras y parasitarias, representadas en la ocasión por militares y politiqueros. Es, también, una mentira el Gran Acuerdo Nacional, porque la política económica del gobierno sólo favorece a los capitales monopolistas extranjeros. …Pero el pueblo ya no es tonto. El pueblo ya ha dicho no a la gran mentira Antinacional…. …Por eso es que estamos gestando el Gran Acuerdo del Pueblo, en contra del acuerdo de la oligarquía, los monopolios, los militares y sus títeres : los politiqueros de la « Hora del Pueblo » y « ENA ».
Y frente a las elecciones de 1973 :
« …las elecciones no son solución, menos un fin, ni la terminación de la lucha del pueblo por la independencia de la opresión monopolista, es un medio, y como tal, hay que considerarlo…lo que debemos mantener es la unidad de la familia agraria agrupada en las Ligas, ya que esto es lo que nos garantizará la justicia para nuestro campo… »
« Pero quien entre, debe tener en cuenta que si no se encuadra dentro del camino de la justicia deberá enfrentar la lucha que hemos emprendido ».
Las ligas son apartidistas. Se definen a sí mismas como organizaciones no partidarias y, en si accionar, esto se traduce en la ausencia de acuerdos y alianzas con partidos o grupos políticos.
Francisco Ferrara, en su libro ya citado, da dos razones que explican este rasgo :
– a) la visión política sólo como manifestación electoral o de comité practicada por los partidos tradicionales, que usó al campesinado como número y que el campesino empieza a rechazar.
– b) la carencia de propuestas políticas revolucionarias o propuestas que superen el trabajo reformista de algunas entidades que por no estar sumergidas en la realidad concreta del campesino, no llegan a interpretar las necesidades latentes de cambio en este sector.
Es decir, las Ligas rechazan la política tradicional, el partidismo, y no se presentan a su juego. Sin embargo, su accionar, sus formas organizativas, sus planteos, van abriendo un camino que es político y tiene una dirección política distinta, nueva y superior.
Una política de contenido y formas revolucionarias. Una política hecha y compartida por el campesinado que lo va convirtiendo en protagonista dinámico en las luchas por la transformación del sistema.
Revista « Puro Pueblo Venceremos », nº4, Agosto del 1974 .
Editorial Ultimo Recurso. 2 de Octubre de 2007.