Portada del sitio > Nuestra América > América Latina muestra su repudio al presidente Georges W.Bush.
Los cinco países que visitará rechazarán la presencia del George W. Bush. Desde Bogotá hasta Montevideo se realizarán actos. De manera confusa Bush dijo sentirse cada vez más latinoamericano
Por la Redacción de APM.
La Plata Argentina, 8 de marzo de 2007.
Organizaciones sociales y de Derechos Humanos acompañaran con sus protestas la gira del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que lo llevará a Brasil, Uruguay, Colombia, Guatemala y México, y se extenderá hasta el 14 de marzo.
Mientras dentro de la arena política los mandatarios latinoamericanos, esbozan los temas a tratar con Bush, trabajadores, estudiantes y organizaciones sociales de Brasil se alistan para realizar actos de protesta. El día de hoy, 8 de marzo, día Internacional de la Mujer, opositoras a Bush pretenden reunir en Sao Paulo a unas 10.000 personas. También habrá concentraciones en las 27 capitales regionales.
Las protestas en el gigante sudamericano tendrán como eje la oposición a la llamada agricultura energética, que busca aumentar la producción de biocombustibles a partir de materias primas como la caña de azúcar y el maíz. Situación que para algunos podría empeorar las condiciones laborales del país.
Por su parte, la Unión Nacional de los Estudiantes (UNE) creó un "Comando de Caza a Bush". Asimismo, otras manifestaciones tendrán un tinte simbólico. Una de las ideas es cercar con azufre el área donde el estadounidense estará para exorcizar el diablo. La iniciativa está inspirada en las palabras del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien en una alocución en Naciones Unidas (ONU) el año pasado señaló que el estrado olía a ese mineral, porque por ahí había pasado Bush.
En tanto, en Uruguay, país donde el estadounidense arribará el viernes, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda y Ayuda Mutua (Fucvam), inició el martes una marcha en Montevideo. "No queremos a ese asesino y genocida en nuestro país, viene a Latinoamérica con la intención de fragmentar", afirmó el dirigente de Fucvam, Eduardo López.
La organización proyecta llegar el viernes a las cercanías de la estancia "Anchorena", ubicada a 200 kilómetros de la capital, en el departamento de Colonia, donde el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez recibirá a su homólogo y luego lo invitará a un día de pesca. No obstante, esa no será la única actividad: partidos de izquierda y la principal central obrera uruguaya anunciaron protestas en Montevideo.
Ese día también habrá acciones de repudio en Argentina. Si bien la gira no incluye ese país, Hugo Chávez encabezará un acto junto a 40 organizaciones sociales en el estadio de Ferrocarril Oeste de Buenos Aires. "Bienvenido presidente Chávez" y "Fuera Bush y el imperialismo", son las consignas preparadas por los organizadores.
Colombia, principal aliado de Estados Unidos en la región, será la tercera escala de la gira. Allí, la Gran Coalición Democrática, agrupación de izquierda, convocó para el próximo domingo una concentración de protesta en Bogotá.
"Vamos a rechazar su presencia por todo lo que representa en las relaciones de completa sumisión que mantiene el presidente (Álvaro) Uribe con respecto de la política exterior de Estados Unidos", sostuvo Fabio Arias integrante de la Coalición.
Bush llegará el domingo a Bogotá y partirá en la noche hacia Guatemala, donde un grupo de 25 organizaciones, mayormente sindicatos, hijos de víctimas de la guerra civil, asociaciones de migrantes y campesinos, planean una marcha de protesta.
En tanto, en México, último lugar de la gira, los movimientos sociales se opondrán a la construcción del muro fronterizo para impedir la entrada de indocumentados al país vecino.
Grupos sociales crearon una "Agenda No Bush" que incluye manifestaciones en Mérida, en los consulados de Estados Unidos. en Monterrey, Acapulco, Guadalajara, Tijuana y Hermosillo, así como una concentración frente a la embajada estadounidense en Ciudad de México.
A pesar de las protestas, a modo de una vaga y confusa coerción, George Bush aseguró que se siente cada vez más latinoamericano, y comparó la lucha libertadora de Simón Bolívar con la de George Washington.