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5 avril 2004

La popularidad de un presidente al que el pueblo de Bolivia no apoya

 

Jaime Zalazar F.
Rebelión, 1 de abril del 2004

Una afirmación contradictoria e ilógica. Si uno se guía por las encuestas de opinión, que arroja como resultado que el presidente Carlos D. Meza cuenta con un 70 % de apoyo ciudadano, es hasta una insensatez. Sin embargo, hay demasiados ejemplos donde la realidad desmiente las encuestas, ejemplos sobran : Se puede recordar un hecho que quedará como una patética anécdota ; aquella del apoyo popular a Goni -también con el 70 % de respaldo de la ciudadanía- pocas horas antes de salir huyendo, una encuesta que fue manipulada sin duda, pero, incluso aquellas elaboradas con "responsabilidad y seriedad profesional", como las encuestas preelectorales en las elecciones últimas, donde candidaturas populares - las del MAS y el MIP, con muchísimos menos recursos económicos en publicidad, encuestas y uso de espacios mediáticos alcanzaron importantes triunfos electorales, pese a encuestas que ni los tomaban en cuenta ; o también, lo que pasó hace pocas horas en España con el "popular" Aznar y su partido el PNP. Se podría seguir con los ejemplos. Vale advertir entonces, como señala Jaime Iturri (La razón 19-3-2004), que los medios de comunicación y las encuestas de opinión, tienen sus límites y es bueno ser consciente de estos límites.

Lo que relativiza la popularidad del presidente son sus promesas incumplidas. Los compromisos que hizo ante el pueblo al momento de asumir su mandato y que prefiguraban un plan de gobierno "progresista", no uno de orientación anticapitalista, eso no estuvo en su discurso, nunca lo estuvo, al respecto no hay engaño que denunciar, solo ese aparente "progresismo".

¿Que es lo que hacia pensar este progresismo ? Según algunos analistas : Su honestidad, su condición de intelectual y fundamentalmente su independencia, esa independencia "política" que le permitiría una posición salomónica, el justo medio, el equilibrio. Una especie de Cesar, aquello que Gramsci describía como la solución arbitral, confiada a una gran personalidad en una situación histórica política caracterizada por el equilibrio de fuerzas de perspectiva catastrófica. Meza parece destinado a jugar tal rol. Lo cierto es que en política no existen los neutrales y el sentido del "cesarismo" que alude Gramsci solo puede operar en sentido progresista o regresivo.

Cinco meses de gobierno autorizan a pensar lo que Meza puede y no puede ser : Lo que no puede ser y nunca fue, es ser independiente políticamente, no importa mucho su inscripción partidaria. En verdad, Meza, nunca estuvo muy preocupado por ocultar su plena identificación con el MNR, por eso fue vicepresidente del Goni y lo acompaño en el desastre de Febrero del 2003, aunque intentó desmarcarse en Octubre, esta evidencia se pone de manifiesto otra vez con fuerza. Hace poco, logró apoyo político partidario reclamado con "dramatismo", como describió algún analista, de ese monstruo que llevó al desastre de Octubre : La Megacoalición. Si eso tranquiliza al presidente, el pueblo debe preocuparse seriamente. Estas señaleca estuvo muy preocupado por ocultar su plena identificación con el MNR, por eso fue vicepresidente del Goni y lo acompaño en el desastre de Febrero del 2003, aunque intentó desmarcarse en Octubre, esta evidencia se pone de manifiesto otra vez con fuerza. Hace poco, logró apoyo político partidario reclamado con "dramatismo", como describió algún analista, de ese monstruo que llevó al desastre de Octubre : La Megacoalición. Si eso tranquiliza al presidente llevó al desastre de Octubre : La Megacoalición. Si eso tranquiliza al presidente, el pueblo debe preocuparse seriamente. Estas señaleca estuvo muy preocupado por ocultar su plena identificación con el MNR, por eso fue vicepresidente del Goni y lo acompaño en el desastre de Febrero del 2003, aunque intentó desmarcarse en Octubre, esta evidencia se pone de manifiesto otra vez con fuerza. Hace poco, logró apoyo político partidario reclamado con "dramatismo", como describió algún analista, de ese monstruo queamente apoyó las iniciativas del gobierno en el sentido de los intereses de la megacoalición.

¿En que consistiría un pacto social, hoy ? ¿ En la aplicación del doble impuesto a los inmuebles, vender el "gas" a cómo de lugar, firmar un acuerdo de libre comercio con Chile -una mini ALCA-, cumplimiento de los compromisos del Estado boliviano -entre otros la impunidad de soldados norteamericanos y nada de más impuestos a las petroleras- y a cambio, la limosnita de seis o siete millones de dolares para garantizar los salarios del sector público ?

Es en este escenario en que se proyecta el Meza que podría llegar a ser.

La historia impone a sus dirigentes pruebas cruciales ; la relación del gobierno con las petroleras es un tema crucial. Se puede afirmar que en este asunto Meza se juega su destino político y personal. Puede mostrar lucidez intelectual y valor condignas a un estadista o, en cambio, cobardía política y pequeñez intelectual propia de funcionarios mediocres.

Esto de ningún modo es solo una apelación al individuo, responde más bien al análisis de la situación ciertamente dramática del país, que impone un corte histórico. Hay fuerzas enfrentadas en el país de manera inocultable : Por un lado, el pueblo trabajador que no admite más, que por ejemplo, el tema marítimo pretenda ser supeditado a lo lógica mercantil de la venta del gas a como de lugar y que se siga descargando la crisis en sus espaldas. Por el otro, quienes defienden sus privilegios y fundamentalmente, los del poder económico transnacional y que poco a poco se rearticulan alrededor de una renovada megacoalición apoyada en un plan terrorista de tinte fascista, que ha empezado a actuar : El crimen de la Fiscal Von Borries en Santa Cruz y la "extraña" desaparición de fusiles FAL de los cuarteles del ejército boliviano, destinados a fuerzas paramilitares (como han denunciado algunos medios), complementan la articulación de fuerzas regresivas dispuestas a todo para lograr sus objetivos.

Los medios juegan su papel, lo explica Iturri, un periodista reconocido, en el artículo que mencionamos, donde cuenta como un funcionario del exgabinete de Goni, confesó que : "A nivel de los grandes medios habíamos logrados que la información estuviera controlado. ......" Esto es cierto, no es novedad y no es un secreto, los medios se encuentran controlados por los intereses económicos y políticos de los poderosos, no solo en periodos de crisis, como la de Octubre, sino cotidianamente.

Esta cotidiana tarea de importantes y poderosos medios se deja notar. Una sugestiva operación mediática destinada a mostrar un presidente con gran respaldo popular, frente a lideres sindicales y populares poco menos que irracionales. Un presidente dotado de virtudes casi sobrehumanas frente a lideres infradotados. La prensa diaria ofrece innumerables ejemplos de lo acabamos de afirmar, un ejemplo de ello es la edición de la Razón del 14 de este mes, donde se dedica importante espacio a hacer apología del "líder", con expresiones superfluas, como eso de que tiene "pinta de patriarca hebreo", que le dedica su amigo Espinosa, o aquella en la que un analista de imágenes le atribuye a una foto del presidente que : lo "rodea un halo divino", por supuesto eso solo lo ve el analista. La descripción que desnuda la intencionalidad de esta apología, es el análisis de la foto donde aparece Meza y Quispe frente a una imponente concentración popular en la Plaza San Francisco, que el analista describe del siguiente modo : "El líder del poncho rojo sonríe (es Carlos D. Meza), Felipe (es Felipe Quispe) agrede con el puño, la chamarra chola....... Mesa por detrás y a la izquierda en un punto más atractivo, Quispe por delante pierde la línea del horizonte popular. Pescando a los otros se esconden las intolerancias, pura lógica occidental..." El mensaje queda claro : Una figura atractiva, la de Meza ; la otra, agresiva, intolerante, la de Quispe, el indígena con chamarra chola. Todo un símbolo de lo que busca la reacción, demonizar a los líderes populares.

Acordamos con Iturri, que los medios tienen sus límites. No hay operación mediática, que por si sola, logre apoyo popular a dirigente alguno. Meza al frustrar las expectativas de la gente, logra no solo que obreros y campesinos comiencen a repudiar sus medidas y a reclamar soluciones a sus problemas, sino que ahora una buena parte de las "clases medias" se han vuelto en contra del presidente como respuesta a su culto ciego al ajuste fiscal.

Las declaraciones públicas del exministro de Defensa del gobierno de Goni, por un canal de televisión, donde se sincera y manifiesta que fue la capitalización lo que tumbó a ese gobierno. Reconoce que mintieron y fracasaron, que se prefirió asesinar antes que aceptar el reclamo legítimo del pueblo : Anular las leyes de capitalización y fundamentalmente la de YPFB.

Si la lección que saca el propio ex ministro es que el primer capítulo de la caída de Gonismo ha sido la capitalización, lo que correspondería es atender la demanda generalizada del pueblo de revertir a los bolivianos la propiedad de sus recursos y el control de sus empresas ¿Lo habrá entendido así el presidente ?

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