Accueil > Les Cousins > Bolivie > Kori Kollo, otro ejemplo de despojo a la integridad territorial en Bolivia
"Se esfuma un cerro de oro del mapa de Bolivia", es el título de una nota periodística (Terra/Reuters 5.03.04) en la que se relata el cierre de operaciones de Inti Raymi en Bolivia.
Por Antonio Ormachea Méndez
7 de marzo del 2004
No es el propósito de este artículo analizar ni menos criticar específicamente la operación minera, comercial o ambiental de la Empresa Minera "Inti Raymi" sino continuar con la reflexión sobre lo que significa la extracción de recursos naturales no renovables sin dejar nada que los sustituya en valor. Evidentemente, se ha esfumado un cerro de oro del mapa de Bolivia y ha quedado en su lugar un gran lago artificial. Al cierre de operaciones, la empresa ha declarado haber pagado, desde 1985 hasta 2000, unos cien millones de dólares de impuestos y cuarenta y dos millones de regalías al departamento de Oruro. También ha afirmado haber invertido en sus ingenios unos doscientos cincuenta y siete millones de dólares con ventas de más de mil doscientos millones.
Por su naturaleza, la inversión efectuada no le sirve para nada ni a Oruro ni al país, una vez concluidas las operaciones para las que fue realizada. No se qué efecto multiplicador pueden haber tenido los 42 millones de regalías pero lo que sí se es que los cien millones de impuestos ya han desaparecido de las arcas nacionales. En resumen : No quedo nada de un activo de mil doscientos millones de dólares que contenía Kori Kollo y el territorio boliviano tiene ahora ese valor menos en sus entrañas, es decir, vale eso menos. Nuevamente, como con la plata y el estaño, la integridad territorial ha sido mermada.
Cabe también reflexionar que, entre impuestos y regalías, Bolivia ha recibido un escaso once por ciento del valor del oro exportado. Otra pésima negociación de quienquiera haya sido responsable desde el gobierno de turno.
Creo que no hay que cansarse de reclamar una legislación que obligue a reponer el valor obtenido de recursos no renovables, mediante inversiones en áreas fundamentales para el desarrollo del país, especialmente en educación y salud. Hay que invertir en nuestro capital humano lo que se le resta a la pacha mama. Cada vez que extraemos recursos no renovables estamos restando valor a nuestro territorio, quitándole calidad, mermando su integridad. Lo menos que podemos exigir es que se devuelva al país el valor de lo extraído a través de inversiones predeterminadas por ley.
Kori Kollo quiere decir, en lengua aimara, cerro de oro. Pues bien, ese fue un cerro de oro. Ahora ya no existe.
La misma empresa indica que, a partir de 2005, se iniciará otro proyecto denominado "Puente de Oro" o Kori Chaka, a 45 km al sur de Kori Kollo de donde se extraerán unas 300.000 onzas de oro, lo que al precio promedio de los últimos 15 años significa unos 106.000.000 de dólares.
¿Qué le quedará a Bolivia de todo eso ?