Accueil > Les Cousins > Bolivie > Bolivia tiene una perversa relación internacional.
Cada año que pasa, Bolivia pierde peso en la arena internacional, achicándose su ya minúscula participación en el comercio exterior.
Las cifras rojas del sector externo muestran su extrema vulnerabilidad y la endeble como inadecuada inserción nacional en un mundo globalizado, que castiga con creciente rigor a los países exportadores de materias primas como Bolivia.
Las exportaciones bolivianas son diminutas, poco diversificadas y concentradas en productos primarios y en reducidos mercados. El déficit comercial es crónico y millonario, ya que las importaciones de productos elaborados no han podido hasta ahora remozar la base productiva exportadora del país.
Otro problema de magnitud es la deuda externa, que equivale al 50 por ciento del PIB. El peso de la deuda es agobiante y su servicio constituye un pesado lastre que esteriliza todos los intentos por mejorar las condiciones de vida de la población, incluso a pesar de las constantes reprogramaciones y condonaciones parciales que sólo constituyen alivios temporales pero no soluciones de fondo.
Esta situación se agrava por la extrema dependencia de Bolivia del financiamiento internacional, que cubre cerca de la mitad de los gastos e inversiones del sector público.