Portada del sitio > Los Primos > Venezuela > Venezuela al borde de la guerra civil.
La confrontación callejera masiva que enfrenta a las clases sociales y divide a la sociedad política e ideológicamente, podría llevar a una sangrienta guerra fraticida.
Hoy desfilaron miles de antichavistas. El domingo lo harán los chavistas. Venezuela es una sociedad dividida, al borde de la guerra civil. Que la oposición venezolana está preparando un nuevo golpe de Estado, no caben dudas. Que el gobierno y las brigadas bolivarianas se van a defender por medio de las armas, tampoco. El golpe clásico es difícil porque los militares, en una proporción significativa de sus cuadros medios, es chavista y está a favor de la llamada ’revolución bolivariana’.
Es que mientras en la Argentina y otros países los militares estudian en la Escuela de las Américas norteamericana, donde aprenden la ’contrainsurgencia’, en Venezuela, durante el boom petrolero-educativo, fueron a estudiar a las universidades públicas y no pocos, leyeron hasta a Antonio Gramsci.
Ayer, la manifestación fue de la clase media, sectores del integrismo católico, los viejos partidos políticos desprestigiados por la corrupción, los grupos empresarios y los sindicalistas burocráticos que responden a Acción Democrática. Pasado mañana, desfilarán las brigadas bolivarianas, los trabajadores, los desocupados, los campesinos y los sectores más pobres. Todos, los primeros como los segundos, están armándose hasta los dientes. Los nuevos vientos brasileños benefician a Chávez, pero la cuestión petrolera es una clave en su contra. Washington quiere dominar el mercado del crudo. Para ello, el Presidente George W. Bush, iniciará la guerra contra Irak y después de ella, irá por Chávez. ¿Qué va a pasar? Es difícil preverlo. Lo que si es seguro que correrá, lamentablemente, mucha sangre.
El final de todo esto está abierto, porque el principal enemigo de Bush no es Osama bin Laden, ni Saddam Hussein, sino la economía, es decir, la recesión, la deflación, la deuda externa y la crisis general de la globalización. Este es el problema y no la economía brasileña sometida en estos días a un golpe de mercado producido por los banqueros.
ArgenpresseFecha publicación:10/10/2002)