Accueil > Les Cousins > Colombie > Renunció la canciller colombiana salpicada por los vínculos de su hermano (…)
Se cae Uribe o es solo limpieza ?
Pese a haber recibido un fuerte apoyo del presidente Álvaro Uribe, María Consuelo Araújo dimitió hoy, cuatro días después de la detención de su hermano senador, a quien la justicia acusa de tener vínculos con los paramilitares. Durante el fin de semana la prensa local bombardeó a la ahora ex funcionaria con artículos que reclamaban su renuncia.
Por Télam.
Buenos Aires, 19 de febrero de 2007.
La canciller María Consuelo Araújo Castro renunció hoy a su cargo en medio del escándalo político más profundo de los últimos tiempos que enfrenta el gobierno colombiano, originado en la detención de su hermano senador por sus presuntos vínculos con paramilitares.
Araújo renunció cuatro días después de la detención de su hermano Alvaro Araújo Castro y otros seis legisladores, mientras se investiga también la situación de su padre, Alvaro Araújo Noguera.
"Me voy porque no estoy atada a ningún cargo, pero en cambio veo claramente la necesidad de que el proceso judicial esté libre de interferencias", dijo Araújo durante una rueda de prensa en la que anunció su dimisión, según consignó la agencia de noticias Ansa.
"La certeza de la inocencia de mi padre y de mi hermano me obliga a irme para tener la libertad de estar a su lado y apoyarles como hija y como hermana", agregó.
El senador oficialista Araújo Castro está acusado por la Corte Suprema de Justicia de los delitos de concierto para delinquir y secuestro extorsivo agravado, igual que otros siete legisladores. Por ese último cargo la Corte también pidió a la Fiscalía que investigue al padre de la canciller, el ex ministro Alvaro Araújo Noguera.
Las detenciones de varios legisladores provocaron un terremoto político, a punto tal que varias voces se alzaron el fin de semana para reclamar la revocatoria de los mandatos de todos los parlamentarios, iniciativa que es rechazada de plano por el gobierno nacional.
Además, la "parapolítica" llegó a los despachos del Congreso estadounidense, donde la mayoría demócrata puso la lupa en el tema, al que ya bautizó como "Paragate".
Un informe aparecido hoy en el diario bogotano El Tiempo señaló que el escándalo podría llevar a EEUU a cambiar su posición respecto de la asistencia que presta al país sudamericano en el Plan Colombia y hasta en el tratado de libre comercio (TLC), ya que debe ser analizado por el cuestionado Congreso colombiano.
"Es un asunto que debe ser explicado hasta la saciedad", dijo al diario colombiano Bill Delahunt, demócrata por el estado de Massachussets y miembro de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes.
Inclusive Patrick Leahy, uno de los senadores demócratas con más poder, pues preside un subcomité que asigna y autoriza los fondos para el Plan Colombia, consideró que el "Paragate" debería "provocar una pausa para determinar con quién estamos tratando".
En el marco de esas investigaciones se ordenó la detención de otros siete congresistas, seis de los cuales ya fueron capturados y trasladados a una cárcel en Bogotá, en tanto que el restante huyó de la justicia y se ordenó su detención internacional.
Todos los parlamentarios, miembros de partidos cercanos al presidente Alvaro Uribe, son de la región Caribe de Colombia y, de acuerdo con la Corte, hay pruebas de que presuntamente recibieron apoyo de las ultraderechistas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) para sus campañas al Congreso en 2002.
La canciller Araújo había sido respaldada en dos oportunidades por el presidente Uribe desde que el jueves a la noche fue detenido su hermano. "Colombia, que le ha perdonado a los culpables y a los dolosos por razones de imagen, no puede condenar a los inocentes", manifestó Uribe el sábado último, durante una reunión del gobierno.
Sin embargo, los embates de la prensa colombiana contra la figura de la funcionaria, conocidos durante el fin de semana, terminaron por convencerla de presentar la renuncia.