Peruanos contratados para proteger objetivos norteamericanos en Irak

El ministro de Defensa, Marciano Rengifo, admitió hoy que peruanos contratados para proteger objetivos norteamericanos en Irak fueron entrenados en instalaciones del Ejército nacional.

Argenpress, 27 de octubre de 2005

Requerido ante el Congreso para dar explicaciones sobre el asunto, el militar defendió la legalidad del contrato que a ese efecto firmó la institución castrense con las empresas locales Gun Supply y Triple Canopy Inc.

Investigamos al respecto y comprobamos que el Ejército está en capacidad de pactar compromisos con terceros, dijo Rengifo, quien agregó que la suerte de los peruanos llevados a aquel país árabe no concierne a las Fuerzas Armadas.

Negó además que en los adiestramientos participara personal del Ejército o se usara parque de esa entidad.

Las empresas (Gun Supply y Triple Canopy Inc) aportaron personal y municiones propias para entrenar a los reclutados, aclaró el ministro ante la Comisión de Defensa del Parlamento.

Señaló que el valor del contrató ascendió a 435.000 dólares por cuatro cursos (sólo se han dictado tres) en el local de la Fábrica de Armamentos y Municiones de Huachipa, en las afueras de Lima.

Al valorar la decisión, sostuvo que dejó un beneficio económico al Ejército, pero acotó que ’tratándose de un tema tan sensible, pudo hacerse una evaluación de tipo político’.

Las alegaciones de Rengifo motivaron duras críticas por parte de varios parlamentarios, quienes le recordaron que en las instalaciones militares sólo puede entrenar personal de las Fuerzas Armadas.

Diversas fuentes cifran entre 500 y 700 los peruanos que ya están en Irak para supuestamente ofrecer protección a personalidades, establecimientos y convoyes, pero sus familiares temen que sean utilizados como carne de cañón.

El proceso de reclutamiento continúa y está a cargo de la empresa local Gestión de Seguridad Sociedad Anónima Cerrada, mientras el entrenamiento corre a cuenta de Gun Supply y Triple Canopy Inc.

La lista de seleccionados es enviada a la compañía 3D Global Solutions Inc., con sede en Indiana, que a su vez la remite a una de las grandes corporaciones privadas de la rama de seguridad militar proveedora de personal al Pentágono o al Departamento de Defensa.

Hace más de una semana la cancillería peruana presentó a Washington una nota en la que solicitaba información sobre su responsabilidad con los reclutados, pero hasta el momento no ha recibido respuesta.

Los elegidos no son considerados ’combatientes’ ni ’no combatientes’, y por tanto no están protegidos por los respectivos Convenios de Guerra de Ginebra.