Accueil > Empire et Résistance > Estrategia de Seguridad Nacional
Fragmentos esenciales traducidos al español
Cubadebate, 16 de marzo de 2006
B. Contexto actual : éxitos y desafíos
El mundo ha experimentado un progreso notable en los más difíciles conflictos regionales que han destruido millones de vida s a lo largo de varias décadas.
En Sudán, Estados Unidos encabezó las negociaciones internacionales que resolvieron de manera pacífica el conflicto de 20 años entre el gobierno de Sudán y el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán.
En Liberia, Estados Unidos encabezó los esfuerzos internacionales para restaurar la paz y reforzar la estabilidad luego de un cruento conflicto interno.
Fuerzas israelíes se han retirado de la Franja de Gaza y del Margen Occidental, lo cual ha creado el prospecto de transformar las relaciones entre palestinos e israelíes, a la vez que pone en relieve la necesidad que la Autoridad Palestina cree un gobierno responsable y efectivo.
Las relaciones entre India y Pakistán han mejorado. Ha habido visitas de alto nivel y ha surgido un nuevo espíritu de cooperación en el tema de la región de Cachemira, cooperación que fue más tangible a través de las acciones humanitarias efectuadas luego del devastador terremoto.
El espíritu de cooperación al esfuerzo de ayuda luego del tsunami que sufrió Indonesia se tradujo en cambios políticos que ayudaron a que se llegara a un acuerdo de paz en el conflicto en la provincia separatista de Aceh.
En Irlanda del Norte, la implementación de cláusulas clave del acuerdo de Viernes Santo, incluyendo la entrega de armas, marcó un hito sustancial en el fin de dicho conflicto civil.
Aún persisten varios desafíos regionales que requieren la atención del mundo :
En Darfur, los habitantes de una región empobrecida son víctimas del genocidio que resultó de una guerra civil que enfrenta a grupos de paramilitares asesinos apoyados por el gobierno de Sudán, contra varios grupos rebeldes.
En Colombia, un aliado democrático combate las persistentes incursiones de terroristas marxistas y narcotraficantes.
En Venezuela, un demagogo rebosante de petróleo está debilitando la democracia e intentando desestabilizar la región.
En Cuba, un dictador anti estadounidense continúa oprimiendo a su pueblo e intenta reducir la libertad en la región.
En Uganda, un culto rebelde salvaje, el Ejército de Resistencia del Señor, está tomando ventaja de un conflicto regional, aterrorizando a una población vulnerable.
En Etiopía y Eritrea, una disputa fronteriza amenaza desembocar en otra guerra entre ambas naciones.
En Nepal, un vil grupo insurgente maoísta continúa aterrorizando a la población mientras el Gobierno se aleja de la democracia.
1. El hemisferio occidental
Estos son los principios que guían nuestras relaciones con otros países en nuestro hemisferio, la línea de defensa de la seguridad nacional de EE UU. Nuestra meta se centra en un hemisferio totalmente democrático, unido por las buenas intenciones, cooperación en temas de seguridad y la oportunidad para que todos los habitantes del hemisferio prosperen. Los tiranos y sus seguidores pertenecen a otra era y no se les debe permitir que hagan retroceder los progresos alcanzados en las últimas dos décadas. Se debe ayudar a los países del hemisferio para que se encaminen en la senda de desarrollo político y económico sustentable. No se debe permitir que el atractivo engañoso del populismo , que se opone al libre mercado , erosione las libertades políticas y encierre a los habitantes más pobres del hemisferio en ciclos de pobreza. Si los países más cercanos a EE UU no son seguros y estables, los estadounidenses estarán menos seguros.
Nuestra estrategia en el hemisferio comienza por profundizar las relaciones estratégicas con Canadá y México, un pilar de valores comunes y políticas de cooperación que pudiesen ser extendidas por la región. Debemos continuar trabajando con los países vecinos en el hemisferio para reducir la inmigración ilegal y promover más oportunidades económicas a los sectores excluidos. También debemos reforzar las relaciones estratégicas con líderes en Centroamérica, Suramérica y el Caribe que estén trabajando para fortalecer los valores democráticos. Finalmente, debemos continuar trabajando con nuestros aliados en la región para que instituciones multilaterales como la OEA y el Banco Interamericano de Desarrollo sean más efectivas y estén mejor preparadas para buscar acciones concertadas que enfrenten amenazas que puedan poner en riesgo la estabilidad, seguridad, prosperidad o progreso democrático en la región. Juntos, estas alianzas pueden ayudarnos a impulsar las cuatro prioridades estratégicas en la región : el refuerzo en materia de seguridad, el fortalecimiento de las instituciones democráticas, la promoción de la prosperidad y la inversión en el desarrollo humano.
Revista Koeyú Latinoamericano
Correo : revista@koeyu.com
Tel. (58212) 481 7740 Cel. : (58) 412 7332730
Web : http://koeyu.blogspot.com
Caracas, Venezuela