Accueil > Empire et Résistance > « Gringoland » (USA) > Ahora los cañones de Washington apuntan hacia Irán.
El próximo objetivo militar de Estados Unidos.
Por Juan C. Alfaro
Redacción de APM. La Plata. Argentina, 22 de diciembre de 2006.
Según dio a conocer el día de ayer el diario estadounidense The New York, un alto funcionario de Washington indicó que Estados Unidos y Gran Bretaña se encuentran movilizando sus buques de guerra hacia el Golfo Pérsico como forma de presión hacia Irán.
Cabe recordar que dentro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) se discute la aplicación de sanciones hacia Teherán y su desarrollo nuclear. El país persa se niega a detener su programa ante las amenazas del llamado bloque occidental liderado por Estados Unidos, que sostienen sin pruebas certeras que tendría fines bélicos.
Según The New York, la fuente citada aseguró que el nuevo jefe del Pentágono, Robert Gates aprobará el envío de un segundo portaaviones a la zona, solicitado por los mandos militares. Si bien dijo que la iniciativa no forma parte de preparativos para una ofensiva, reconoció que "crece la posibilidad de atacar a Irán".
Por su parte The Times aseguró citando a un a un funcionario estadounidense que mantuvo el anonimato que "se espera que esta semana el secretario de Defensa apruebe una petición de comandantes para (enviar) un segundo portaaviones y sus barcos de apoyo para que sean colocados a una distancia de navegación rápida de Irán " a comienzos de 2007.
La fuente sostuvo que esta iniciativa no forma parte de preparativos para una ofensiva, aunque "reconocen que la posibilidad de atacar a Irán crece y que los líderes iraníes podrían aumentar sus provocaciones". La marina británica "planea agregar dos buques barreminas a su flota, la que ya forma parte de la coalición internacional que patrulla las aguas en el Golfo", agregó la publicación.
Estos movimientos bélicos son casualmente ejecutados horas antes de que el Consejo de Seguridad vote sobre la cuestión nuclear iraní. El borrador de la resolución presentado por Francia y Gran Bretaña es firmemente apoyado por Washington, ya que aconseja imponer sanciones a Irán, a pesar de que éste omite la prohibición de viajar y permitir la entrada de varios ciudadanos iraníes implicados en el programa nuclear iraní.
La dama de los halcones de Washington, la secretaria de Estado, Condoleezza Rice dijo que "no es ningún secreto que hubiéramos preferido haberlo tenido antes de haber sido el único en elaborarlo, y por supuesto podría haber incluido otras cuestiones".
Rice subrayó que la resolución le dejaría claro a Irán que "la comunidad internacional no va a tolerar su desafío". Sería bueno recordarle a la funcionaria estadounidense que los que ella llama "la comunidad internacional", son un puñado de países bajo su liderazgo. Además, un gran porcentaje de países del orbe dieron el visto bueno al desarrollo nuclear pacifico de Irán en la ultima cumbre de los países No Alineados (NOAL). Entonces ¿de qué comunidad internacional habla la dama de los halcones estadounidenses ?
Es más, dentro del mismo Consejo de Seguridad con sus cinco miembros con derecho a veto -Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Gran Bretaña- existen diferencias en cuanto a una condena hacia el país islámico.
Según el último borrador de trabajo, se prohíbe a los países distribuir materiales específicos y tecnología que pueda ser empleada o contribuya a que Irán perfeccione sus programas nuclear y balístico.
En este marco, Rusia juega un papel muy importante, dado que es el principal abastecedor de tecnología nuclear de Teherán y además le vende armamento sofisticado a ese país.
Es por eso que en conferencia de prensa el canciller ruso, Sergei Lavrov, criticó el borrador de resolución. "Nuestros socios intentan cambiar la situación a su favor, pero cortarán los lazos económicos y comerciales en áreas totalmente legítimas", comentó Lavrov.
Las potencias europeas y Estados Unidos quieren que el Consejo de Seguridad apruebe la resolución esta semana. Sin embargo, Moscú dio algunos indicios de por qué el documento no tiene su aval.
"La prohibición de viajar a funcionarios iraníes es, en nuestra opinión, una especie de castigo y desde un principio aclaramos que no íbamos a aceptarlo", sentenció el canciller de Rusia.
Por su parte, uno de los socios espartanos de George W. Bush, el primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair prepara el terreno para una eventual condena contra Irán.
De visita en Dubai, Blair llamó a los países "moderados" de Medio Oriente a unirse contra el "radicalismo iraní".
"Debemos apoyar a los gobiernos y pueblos moderados y modernizadores en esta región. Debemos reconocer el desafío estratégico que representa el gobierno de irán, no su pueblo, y posiblemente no todos sus gobernantes, pero aquellos que actualmente dirigen sus políticas", dijo Blair.
Bajo este marco, se pueden citar dos hechos más que señalan que se esta preparando el terreno para un ataque militar contra Irán. Hace unos cuantos días el otro socio espartano de Bush, el primer ministro israelí, Ehud Olmert sugirió ante una cadena de televisión alemana que Israel posee armas nucleares.
Más allá del conocimiento general del estatus nuclear de Tel Aviv, las declaraciones de Olmert fueron tomados por muchos medios de prensa como un lapsus. Sin embargo, con este escenario desplegado esa apreciación se torna errónea. ¿Fue realmente un desliz o un ejercicio deliberado de amenaza de Israel a Irán ?
Desde hace varios meses distintos informes y análisis sostienen que sino es Estados Unidos el que ataque a Irán, el encargado de llevar a cabo esa tarea sería Israel, sumando el hecho de que utilizaría armas nucleares en esa acción.
El segundo hecho a destacar es que según informaciones recientes el Pentágono está solicitando 99.700 millones de dólares adicionales para las campañas bélicas en Iraq y Afganistán. Sin embargo, ese dinero ¿no estaría destinado a su vez a un eventual ataque militar contra Irán ?
Se sabe que dentro del ala mas dura de los halcones de Washington un ataque a Irán es una idea que se viene manejando desde hace más de un año.
Para lograr esto, es necesario para Estados Unidos y sus aliados desgastar toda solución diplomática a la cuestión nuclear iraní. Se vislumbra que en caso de que se aprueben sanciones contra Teherán, estas no se cumplirían en su totalidad, principalmente porque Rusia y China tienen muchos intereses en el país persa.
Entonces, agotada la vía diplomática Washington y su sequito tendrían la excusa perfecta para una acción militar contra Irán.
¿Y cuales son las principales razones ?
En los recientes comicios legislativos desarrollados en el país persa, los opositores del presidente Mahmoud Ahmadinejad ganaron y algunos analistas sostienen que esta situación es un revés para el mandatario. Esa coyuntura de política interna puede ser usada por Estados Unidos y sus aliados en pos de sus intereses.
Por otra parte, en los últimos meses Teherán se ha posicionado como un factor de gran importancia en los conflictos de Medio Oriente. Es más, desde muchos sectores dentro de Estados Unidos se aconseja el dialogo con Irán es virtud de una búsqueda de soluciones para esa región.
Esto sin lugar a dudas, no es una vía del agrado de los halcones de Washington y Tel Aviv. El país persa, para ellos, no puede ser una potencia regional, ese papel está reservado exclusivamente para Israel.
Además, esta también el jugoso botín de guerra negro. Irán es segundo mayor productor de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y también cuenta con la segunda reserva de gas a nivel mundial.
Esta semana Teherán pidió a sus compradores de petróleo que le paguen en euros, debido a que está removiendo los dólares de las reservas, dijeron ayer funcionarios y fuentes de la industria iraní.
Alrededor del 57 por ciento del ingreso de Irán por las exportaciones de 2,38 millones de barriles por día (bpd) de crudo es ahora en euros, de acuerdo a Gholamhossein Nozari, director administrativo de la National Iranian Oil Company (NIOC).
La estatal NIOC, actuando bajo las instrucciones del Banco Central de Irán, ha incluido una nueva cláusula en los contratos de suministro de petróleo que le permiten solicitar el pago en euros u otras divisas.
Esta cuestión es por demás importante, ya que el la guerra económica que tiene el euro y el dólar, la decisión de el país persa puede perjudicar en gran medida a los intereses estadounidenses.
Muchos analistas consideran que una de las razones para el ataque a Iraq en 2003 fue la decisión de Saddam Hussein de cotizar el petróleo en euros y exigir que éste se pagara en la divisa europea y no en dólares.
Este factor explica el interés estadounidense de llevar a cabo la campaña militar contra Iraq, donde primó el deseo de la Administración Bush de asegurar el papel del dólar como divisa única en la que se pagan las transacciones petrolíferas en el mercado internacional.
El golpe que recibieron Bush y sus huestes en las últimas elecciones legislativas, los marines empantanados en Iraq, la decadencia de Estados Unidos como potencia unipolar, no son barreras que puedan impedir los delirios imperiales de estos hombres. El petróleo y la industria militar son los motores que impulsan todas sus guerras de conquista.
El objetivo Irán parece estar en la cuenta regresiva y una nueva guerra de conquista retumba en la conciencia de la humanidad, mientras muchos solo observan inertes el día de la hora cero.