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27 août 2014

Ucrania : ¡Es la economía, estúpido !

par Guadi Calvo *

 

Ya es legendaria la frase que según algunos cuentan, el entonces candidato demócrata Bill Clinton, le lanzó a uno de sus colaboradores en plena campaña presidencial de 1992. Como dicen por ahí se non è vero, è ben trovato. Sin duda la idea es muy cierta siempre es la economía, con epítetos o sin ellos.

Obama habrá pensado muchas veces esa frase tras el disloque de Ucrania, hasta ahora, el único éxito que se puede arrogar Estados Unidos en la cuestión ucraniana, es haberle atado las manos a la Federación de Rusia, para que no pueda intervenir con fuerza en el genocidio que el estado sionista viene perpetrando contra la Franja de Gaza desde hace cincuenta días. La situación en las regiones separatistas ucranianas es suficientemente sensible para que Moscú se embarque en otro frente, aunque sea diplomático.

La prensa adicta a Washington y la Unión Europea, viene desarrollando una impresionante campaña, en la que intentan involucrar a Rusia en todo lo que suceda en esos territorios a los que insisten en llamar pro-rusos, solo por ser ruso parlante.

Los habitantes del Este ucraniano resisten a Kiev porque saben muy bien los caminos que va a intentar recorrer el presidente Petró Poroshenko y sus peligrosos aliados : Por un lado políticas neoliberales con el recetario del Fondo Monetario Internacional (FMI) y por otro, políticas absolutamente represivas ejecutadas por los comandos paramilitares de Pravy Sektor y el Partido Svoboda, que desde diciembre pasado, tras haber sido entrenados por la CIA y el Mossad en Polonia, no han estado ausentes en ninguno de los actos violentos que se han sucedido en el país.

Desde febrero último cuando el heterogéneo conglomerado político, que iba desde sectores neonazis hasta agentes del sionismo internacional, como el tristemente célebre Bernard Henry-Levy, pasando por representantes del Tea Party US representado en la figura del senador John McCain, pudo terminar con el gobierno de Víctor Yanukovich, Ucrania comenzó un proceso de inestabilidad que se extiende hasta hoy y amenaza con proseguir durante muchísimo tiempo más.

Esta realidad construida por el Departamento de Estado US fundamentalmente con el fin de contener la expansión rusa, sobre las ex repúblicas soviéticas desmembradas tras la caída del bloque socialista, no hace más que encajarse cada vez más profundo en el lodazal ucraniano, y con desesperación de ahogado, Estados Unidos, arrastra a lo profundo a todos aquellos que tiene cerca.

Como para empezar el gobierno de Petró Poroshenko, esta jaqueado por una economía en bancarrota. Según el Financial Times de Londres la economía de Ucrania está pulverizada ; tras nueve meses de la confrontación con Moscú, se ha desgastado al borde del naufragio. El diario londinense plantea dos escenarios inmediatos y ambos son espeluznante para la sobrevivencia de millones de ucranianos. La primera refiere acerca de si el FMI continuará inyectando capitales, lo que parecería imposible o que Kiev se declarase en quiebra, para intentar a una reestructuración de la deuda pública. ¿Quién y a que tazas, podría financiar a un país que inmerso en una guerra civil, de la que ningún analista se animaría a predecir un triunfador, y muchos menos que quedará de ese país una vez lanzado el último misil ? Además declarase en default sería un pésimo ejemplo para muchos países del continente. Europa no puede dejar atrás la crisis y hoy, hasta la misma Alemania está dando muestras de agotamiento económico con índices de crecimiento negativo.

La crisis europea, se siguió profundizando este lunes cuando el, ahora, ex ministro de economía francés Arnaud Montebourg, se plantó frente al Presidente François Hollande, reclamando el fin de las políticas de austeridad, haciendo estallar por los aires al gabinete en pleno. Hollande con algún maquillaje rearmó inmediatamente su gabinete, dispuesto a continuar con estos planes según lo marca la alemana Ángela Merkel, convertida de hecho, en la guía y faro espiritual de Europa entera.

Las acciones de Moscú, en respaldo a los separatistas ruso parlantes, han desatado por parte de los Estados Unidos una serie de sanciones a los que la Unión Europea ha adherido mansamente sabiendo que iba a ser el pato de la boda. Redoblando la apuesta el presidente Vladimir Putin contestó con la misma jugada, por lo que muchas exportaciones fundamentalmente del sector agrícola de Europa a Rusia han sido suspendidas por tiempo indeterminado.

Las protestas de los productores de la Unión Europea no han tardado en hacerse sentir, exigiendo a sus gobiernos alejarse de la línea beligerante de los Estados Unidos y levantar las sanciones a Moscú, que ha dejado de abastecerse en los mercados europeos y ha salido a buscarlo en América Latina entre otros lugares. Varias delegaciones de países latinoamericanos ya se encuentran negociando en Moscú. De completarse las negociaciones con los nuevos proveedores, quizás los agricultores europeos hayan perdido un gran cliente por mucho, mucho tiempo.

La guerra la gano yo

No es improbable que el multimillonario Petró Poroshenko a la sazón también presidente de Ucrania, alguna tarde aburrida de su lejana infancia en un televisor blanco y negro con muchas rayas haya podido ver una vieja película argentina de 1943 dirigida por el gran Francisco Mujica « La guerra la gano yo », donde el insuperable Pepe Arias, protagonizaba un inescrupuloso almacenero de barrio, que con la excusa de la guerra en Europa, amasaba una nada despreciable fortuna.

Si bien Poroshenko a esta guerra llegó ya muy rico, gracias a su fábrica de chocolates, que le abrió la puerta a múltiples rubros como los medios de comunicación y la fabricación de armas, entre otros. Imbuido del espíritu de aquel almacenero de barrio porteño no ha obviado la posibilidad de acrecentar su fortuna gracias a la guerra.

El rubicundo presidente de Ucrania, pretende gastar otros 2 200 millones de euros en la guerra, quizás sea para vestir y armar a los nuevos efectivos que gracias a la ley dictada el 23 de julio pasado le permite al gobierno movilizar a todos los reservistas de hasta sesenta años.

Con el fin de financiar el armamento Poroshenko ha solicitado más créditos a sus aliados de occidente además de crear un nuevo impuesto de 1,5 por ciento a los ingresos de la población para cubrir los nuevos gastos de la guerra en el Este, además de haber hecho correcciones en el presupuesto del 2014.

Quizás para Kiev, ganar la guerra civil contra los separatistas, no resulte tan buen negocio, después de todo. Los intensos combates han dañado casi la totalidad de la infraestructura de las regiones en lucha : autopistas, ferrocarriles, aeropuertos, fabricas, escuelas y hospitales han sido prolijamente destruidas por la artillería y los aviones que responde a Kiev, conseguir poner esas zonas de pie consumiría no solo muchísimos millones de dólares sino también mucho tiempo y paciencia y finalmente llevarlas a los niveles de productividad anteriores a la guerra será casi imposible. Donetsk y el resto de las localidades rebeldes eran las más productivas de la vieja Ucrania.

Por otra parte Rusia es poseedora de bonos del Tesoro de Ucrania por valor de 3 000 millones de dólares que compró durante la presidencia de Yanukovich. ¿Qué sucederá el día que Moscú pida la ejecución de esa deuda ?

Más allá de los muertos y heridos, más allá de la destrucción y la posible fragmentación del estado ucraniano, se anotan junto a Poroshenko docenas de ricos empresarios dispuesto a recibir su rebanada de este nuevo pastel cocinado con la mucha torpeza de los Estados Unidos. La guerra se sigue desarrollando y los muertos se siguen amontonando casi a la misma velocidad que los millones de dólares en las cuentas bancarias de los que rápidamente comprendieron la frase de Bill Clinton, es la economía, estúpido.

Guadi Calvo para Hamartia

Hamartia. Buenos Aires, el 26 de Agosto de 2014

*Guadi Calvo es escritor y periodista argentino. Analista internacional especializado en África, Medio Oriente y Asia Central. Colabora con diferentes medios escritos y radiales de América Latina. Dirige en Facebook : « Línea Internacional », « Revista Hamartia » y « Jornada Latinoamericanas », « Revista Archipielago » (México), « Caratula » (Nicaragua), « A Plena Voz » (Venezuela), Radio Madre (AM. 530) y Radio Grafica (FM 89.3)). Colabora con « Rebelión » y « El Correo de la Diáspora argentina »

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